5 consejos de escritura romántica de la autora Marta Lujan (Christine Cross).

 


Saludos, continúo con la publicación de consejos de escritura romántica aportados por un grupo de autoras amigas que se han aventurado a tomar al género como algo más que un hobby.

Hoy tendremos a MARTA LUJAN (CHRISTINE CROSS), una escritora española de Novela Romántica que publica con el sello Selecta de Penguin Random House y cuya novela “La maestra de las flores” ha quedado finalista en los VIII Premios Kiwi Ra (2021).

MARTA hoy nos trae unos consejos muy interesantes en base a la creación de personajes literarios. Los invito a leer todo el aporte, ya que posee una información muy útil:

 

La descripción de un personaje es un reto difícil al que nos enfrentamos los escritores. Sin duda, dentro de la romántica, los personajes son el elemento clave, ya que las historias no giran solo alrededor de los hechos que realizan, sino, sobre todo, alrededor de sus sentimientos y de cómo evolucionan.

Describir a nuestros protagonistas, y hacerlo bien, es esencial. ¿Cómo podemos hacerlo? He aquí cinco pasos que pueden ayudarnos siempre.

1.      Lo primero sería escribir un perfil de cómo es a nivel físico, especialmente aquellos detalles particulares que lo destacan de los demás (una cicatriz, un tatuaje, algún rasgo especial…) y lo convierten en alguien único. Es importante anotarlo, porque puede sucedernos que empecemos diciendo que tiene los ojos azules y a mitad de la novelas se los hayamos cambiado a negros o verdes.

«El pelo más negro que el carbón, unos ojos negros, atrevidos, una enorme nariz cesárea y una boca huraña, llena de sensualidad... ya solo la cara le daba derecho a ser de la estirpe de Lucifer». (Abandonado a tus caricias, Loretta Chase)

2.      En segundo lugar, hay que usar términos descriptivos creativos y no adjetivos simples. No pretendemos hacer una descripción precisa, de esas de diccionario, sino más bien una que estimule la imaginación del lector. Por ejemplo, en lugar de decir que alguien tenía los ojos verdes, podemos decir que tenía los ojos del color del musgo; o, si son grises, pues que los tenía del color de un mar tormentoso.

«Sus ojos eran del color del cielo en una mañana clara, un azul intenso, aún mas intenso en contraste con su piel bronceada. Había algo en él, una clase de fuerza interior que hizo que ella diera un paso atrás ante la intensidad de su mirada». (Escándalo en primavera, Lisa Kleypas)

3.      Es importante tener también el perfil psicológico completo del personaje: sus talentos, sus principios morales, sus puntos fuertes y débiles, sus preferencias, etc. No se trata de sacarlo a relucir todo en la novela, pero nosotros debemos conocerlo muy bien, de tal forma que sepamos siempre cómo va a reaccionar. Los rasgos que aparezcan en la historia deben ir racionados y, en la medida de lo posible, acompañados de acciones.

«Para un libertino como Malory, el boxeo era tan sólo un ejercicio físico para mantenerse en buen estado y contrarrestar la vida disipada que llevaba. Sus visitas, tres veces por semana, a Knighton's Hall tenían para él la misma importancia que sus cabalgatas matutinas por el parque. Solo le proporcionaban placer». (Tierna y rebelde, Johanna Lindsay)

4.      Describir cómo el personaje interactúa con su propio ambiente, o en una determinada situación, puede proporcionarnos también información sobre su inteligencia, su conciencia o su forma de ser. Por ejemplo, si está en un baile, ¿qué hace?, ¿cómo se mueve? Incluso si no hace nada y se mantiene simplemente apoyado contra una columna, esto también nos dice algo sobre él.

«—No seas irrespetuoso, James; además, me basta con llevar las riendas de mi propia casa, lo cual ya es bastante trabajo con hijos como vosotros —replicó mientras pasaba la mirada por sus tres hijos varones—; tal vez si os casarais, podría vivir un poco más en paz.

James alzó una ceja arrogante, y Robert, que acababa de regresar de una misión del gobierno, hundió más la nariz en su taza de café. Edward fue el único que se atrevió a responder». (Algo más que una dama, Christine Cross)

5.      Por último, hay que tener en cuenta también los diálogos, ya que nos permiten describir los pensamientos y otros aspectos del personaje: ¿cómo habla?, ¿qué tono usa?, ¿gesticula?, ¿tiene tics? Y, por otro lado, los verbos de acción aplicados a los atributos físicos, por ejemplo, el hecho de enarcar las cejas, fruncir los labios, el temblor de una mano al sujetar una copa, etc.

«Durante un largo rato se quedaron parados mirándose fijamente. Ella esperaba que fuera él el primero en hablar. Y él esperaba que fuera ella la que explicara su presencia allí.

Alesandra fue la primera en ceder. Avanzó hasta que estuvo cerca del primer escalón. Luego hizo una reverencia con la cabeza. y dijo:

—Buenas noches, Colin. Qué bueno que volvamos a vernos.

Su voz sonó maravillosamente atractiva. Colin trató de concentrarse en lo que la joven acababa de decir. Pero le resultó ridículamente difícil.

—¿Que volvamos a vernos? -preguntó. Oh, Dios, qué tosco pareció.

—Sí, nos conocimos cuando yo era una, niña y usted me había puesto el apodo de Mocosa.

El comentario forzó una sonrisa reticente por parte de él. Sin embargo, no recordaba en absoluto haberla conocido antes.

—¿Y era una mocosa?

—Oh, sí —le contestó ella—. Me contaron que hasta le he dado patadas, y varias veces, pero eso fue hace mucho tiempo. Ya he crecido y no creo que el apodo vaya conmigo ahora. Además, hace años que no doy patadas a nadie.

Colin se apoyó contra la baranda para no recargar tanto sobre su pierna lastimada. el peso de su cuerpo.

—¿Dónde nos conocimos?

—En la casa de campo de su padre —explicó ella—. Mis padres y yo habíamos ido de visita y usted acababa de llegar a su casa, desde Oxford. Su hermano acababa de graduarse.

Colin aún no podía recordarla, pero no se sorprendió por eso. Sus padres siempre habían recibido muchas visitas y él no prestaba atención a ninguna de ellas. La mayoría de ellos eran desafortunados y su padre, que tenía el corazón grande como una casa, siempre acogía en el seno de su hoyar a todos lo que le pidieran ayuda.

Alesandra tenía las manos unidas y parecía estar muy relajada. Sin embargo, Colin advirtió la blancura de sus dedos, a los que apretaba con fuerza, por temor o nerviosismo. Entonces, no estaba tan tranquila como pretendía hacerle creer. De pronto, su vulnerabilidad fue muy aparente y Colin sintió la imperiosa necesidad de hacerla sentir más cómoda.

—¿Dónde están sus padres ahora? —le preguntó.

—Mi padre falleció cuando yo tenía once años —le contestó— y mi madre, el verano siguiente. ¿Señor, quiere que lo ayude a recoger sus papeles? —agregó precipitadamente con la esperanza de cambiar de tema.

—¿Qué papeles?

Su sonrisa fue encantadora.

—Los que se le han caído.

Colin bajó la vista y vio los papeles desparramados por los peldaños. Se sentía como un rotundo idiota, parado allí, tomando solo aire en su puño cerrado. Sonrió ante su propia preocupación. Por cierto, no era mejor que su mayordomo, pensó para sí, y Flannaghan tenía una excusa aceptable para su comportamiento atontado. Era joven, inexperto y bastante simplón.

Sin embargo, Colin debía saber cómo desenvolverse en una situación así. Era mucho mayor que su sirviente, tanto en años como en experiencia. Claro que esa noche estaba agotado, concluyó, razón por la que seguramente estaba comportándose como un tarado.

Además, la muchachita era una preciosidad. El soltó un suspiro.

—Después recogeré los papeles —le dijo él—. ¿Cuál es, exactamente, el motivo de su presencia en esta casa, princesa Alesandra? —le preguntó Colin sin preámbulos».

 

Si prestamos atención a los detalles en la construcción de nuestros personajes, sin duda ya tenemos ganada la mitad de la curiosidad de nuestros lectores.

 

Excelente este aporte de MARTA LUJAN (CHRISTINE CROSS), ¿no creen?

La autora, además de escritora, es una lectora voraz. En sus redes sociales publica constantemente reseñas de los libros que ha leído y posee un blog en el que habla de literatura. Este año publicó una novela a cuatro manos con su hermana Anne Marie Cross.

Espero te haya gustado esta entrada y te animes a crear tus propias historias. Recuerda que puedes contar con las asesorías personalizadas y los CURSOS ONLINE que ofrezco, si necesitas información al respecto puedes escribirme a mi correo jonairacampagnuolo@gmail.com y te atenderé con gusto.

¿Te atreves a escribir Novela Romántica?

 

 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario